PLAN DE ÁREA DE LENGUA CASTELLANA
PRESENTACIÓN
Partiendo del lenguaje como aspecto fundamental en la identificación del hombre con su entorno y entendiendo que es a través de éste como se configura el universo simbólico y se construyen los imaginarios colectivos en la cultura de los pueblos, cobra validez la enseñanza de la Lengua Castellana en la formación de seres humanos íntegros.
Nuestra área está diseñada para la aplicación y optimización de las competencias comunicativas, el desarrollo de las habilidades básicas del lenguaje y las competencias interpretativa, argumentativa y propositiva en procesos de análisis y producción textual. Sus contenidos están enfocados hacia el desempeño de los diferentes niveles de desarrollo en el campo social, cognitivo, actitudinal, diversidad étnica y cultural, estética y físico.
El área se caracteriza por realizar al interior de nuestra institución diversas actividades como el proyecto comunicativo del periódico mural, la semana del Idioma y la integración de proyectos de investigación y profundización (de maestría) como oportunidad de mejoramiento en los procesos de enseñanza y aprendizaje de lengua castellana.
FUNDAMENTOS LÓGICO- DISCIPLINARES DEL ÁREA
Desarrollo de competencias
En el área de Humanidades: Lengua Castellana las competencias están asociadas a los procesos de significación, en términos de potencialidades y capacidades que se materializan desde la puesta en escena de las cuatro habilidades comunicativas desarrolladas anteriormente y los desempeños discursivos a que dan lugar. Las competencias permiten determinar y visualizar énfasis en las propuestas curriculares “[…] organizadas en función de la Interestructuración de los sujetos, la construcción colectiva e interactiva de los saberes y el desarrollo de competencias” (MEN, 1998, p.50). Las competencias específicas del área de Lengua Castellana son:
- Una competencia gramatical o sintáctica referida a las reglas sintácticas, morfológicas, fonológicas y fonéticas que rigen la producción de los enunciados lingüísticos.
- Una competencia textual referida a los mecanismos que garantizan coherencia y cohesión a los enunciados (nivel micro) y a los textos (nivel macro).
- Una competencia semántica referida a la capacidad de reconocer y usar los significados y el léxico de manera pertinente según las exigencias del contexto de comunicación.
- Una competencia pragmática o socio-cultural referida al reconocimiento y al uso de reglas contextuales de la comunicación.
- Una competencia Enciclopédica referida a la capacidad de poner en juego, en los actos de significación y comunicación, los saberes con los que cuentan los sujetos y que son construidos en el ámbito de la cultura escolar o socio-cultural en general, y en el micro-entorno local y familiar.
- Una competencia literaria entendida como la capacidad de poner en juego, en los procesos de lectura y escritura, un saber literario surgido de la experiencia de lectura y análisis de las obras mismas, y del conocimiento directo de un número significativo de éstas.
- Una competencia poética entendida como la capacidad de un sujeto para inventar mundos posibles a través de los lenguajes, e innovar en el uso de los mismos. Esta competencia tiene que ver con la búsqueda de un estilo personal.
Estas competencias tienen un énfasis diferente cuando pasan a los estándares, pese a que conservan elementos articuladores y, por tanto, se vinculan metodológicamente en unos ejes que sirven de referentes para el trabajo curricular y como horizonte del área. Cada eje curricular trabaja unas competencias, algunas con un mayor énfasis que se integran en el momento de la planeación de las prácticas pedagógicas; “[…] comprender el sentido de las competencias permite al docente tomar una posición clara frente a la pedagogía del lenguaje, independientemente del modelo de organización curricular que se defina dentro del Proyecto Educativo Institucional” (MEN, 1998, p.52)
EJES ALREDEDOR DE LOS CUALES PENSAR PROPUESTAS CURRICULARES
Procesos de construcción de sistemas de significación
En este se abordan las formas en que se construye la significación y la comunicación en el código escrito y en otros sistemas simbólicos, a partir de cuatro niveles que le permiten al docente comprender cómo aprende y se apropia de la lengua el estudiante, según su ciclo de formación: nivel de construcción o adquisición del sistema de significación y nivel de uso (primeros años de escolaridad, principalmente); nivel de explicación de los sistemas de significación y un nivel de control sobre el uso de los sistemas de significación, una vez los dos anteriores hayan posibilitado un desarrollo de competencias.
Procesos de interpretación y producción de textos
En este se definen los tres tipos de procesos pertinentes para la comprensión, la interpretación, el análisis y la producción de diferentes textos: procesos referidos a la estructura intratextual, que tienen que ver con las competencias gramatical, semántica y textual; procesos referidos al nivel intertextual, que alude a las relaciones de los textos con otros, donde se ponen en juego las competencias enciclopédica, literaria y al nivel extratextual, relacionado con la reconstrucción del contexto ideológico y político, aquí se pone en juego la competencia pragmática.
Procesos culturales y estéticos asociados al lenguaje: el papel de la literatura
Comprende tres dimensiones y paradigmas de la literatura en tanto experiencia de lectura y desarrollo de la argumentación: como representación de la cultura y suscitación de lo estético (desde la estética), como lugar de convergencia de las manifestaciones humanas (desde la historiografía y la sociología) y como ámbito testimonial (desde la semiótica).
Principios de interacción y procesos culturales implicados en la ética de la comunicación
Aborda la relación de la comunicación con el reconocimiento de los diferentes códigos sociales y lingüísticos que tienen presencia en nuestro país y evidencian la diversidad étnica y cultural; por tanto, hacen parte de la construcción de condiciones básicas para la convivencia social.
Procesos de desarrollo del pensamiento
Alude a las estructuras del lenguaje y la cognición que se adquieren en la interacción social y que se usan en contextos diversos. En este eje se presentan estrategias cognitivas, metacognitivas y pedagógicas para abordar los procesos de comprensión, producción y todos aquellos asociados con la significación.
FUNDAMENTOS PEDAGÓGICO-DIDÁCTICOS: METODOLOGÍA
En la dinámica de la orientación de la lengua castellana, las estrategias metodológicas delineadas en este plan, se inscriben dentro de unos principios teórico-prácticos que establece la ley General de Educación y nuestro PEI sobre la pedagogía del lenguaje. Los aprendizajes están fundamentados en enfoques de carácter semántico-comunicativo, pragmático y crítico, que pretenden el desarrollo y fortalecimiento del lenguaje a partir de metodologías variadas y flexibles que, a su vez, parten de situaciones problema, aprendizaje cooperativo, vivencial, conceptual y trabajo por procesos, entre otros. Un trabajo metodológico orientado al trabajo en equipo y a la cooperación guiada, que priorizan la construcción del conocimiento, el aprendizaje participativo en pequeños grupos y finalmente, el aprendizaje orientado por el docente se sustenta en un rol de facilitador, creador de ambientes que estimulan experiencias para el avance a estructuras cognoscitivas superiores.
Desde la metodología y las estrategias del área, las actividades que se plantean están enfocadas en la aplicación de los modelos descritos arriba con enfoque constructivista, mediante preguntas problematizadoras como punto de partida para que el estudiante piense, investigue, analice, deduzca y formule con capacidad crítico-reflexiva, saque sus propias conclusiones, confrontándolas con su realidad y contexto social. También se tendrá en cuenta el desarrollo de competencias y las estrategias que evidencian su aplicabilidad en forma eficiente.
MODELOS DE EVALUACIÓN
Se ha hablado de la importancia de la evaluación como investigación, lo mismo que de la necesidad de pensar la evaluación en relación con los diferentes componentes de los procesos educativos, teniendo en cuenta la complejidad de los mismos. A continuación, se ofrecen algunas reflexiones sobre la evaluación y las propuestas de instrumentos como referencia teórico-práctica.
La evaluación de procesos: herramientas de aula
Se convierte en un proceso significativo para la práctica docente real, en un momento de reflexión para la cualificación de las prácticas, las estrategias, los instrumentos y las concepciones. Además, la teoría en la evaluación se concibe como herramienta para abordar problemas.
Evaluación como investigación
La investigación se refiere a un proceso sistemático, permanente y continuo, mediante la recolección de información para reorientar o validar estrategias, prácticas, instrumentos y tipos de interacción y reflexionar sobre el desarrollo de procesos. La información del proceso evaluativo se convierte en autoevaluación del docente y de sus prácticas. En cuanto al estudiante, tiene el derecho de conocer los procesos en los que está inmerso, cómo se direccionan las estrategias y los instrumentos utilizados por el docente.
Sistematización y seguimiento
La evaluación para docentes y estudiantes, como proceso integral, debe ser sistemática y continua. Por parte del docente, el seguimiento es la sistematización de la información del acto evaluativo: archivos de pruebas, trabajos escritos y entrevistas. La información, los análisis y reajustes de los procesos deben ser fechados y archivados. En este sentido los instrumentos de seguimiento, ya sea semanal, mensual o bimestral, que evidencian los avances mediante trabajos escritos, intervenciones, instrumentos, comentarios de padres de familia y observaciones del colectivo de docentes. A los estudiantes, el seguimiento les permite tomar conciencia sobre la complejidad de los procesos educativos, avances y dificultades.
La evaluación referida a los modelos de procesos
Son importantes como guías, como mapas. Son el referente de contrastación de los resultados de los actos evaluativos y se basan en las concepciones sobre la educación. Por ejemplo, el diseño de unidades de trabajo o proyectos pone en juego una concepción sobre los procesos de conocimiento, donde el modelo es el referente, la guía. Con base en él se realiza la selección de estrategias, recursos e instrumentos de evaluación, lo que permite reorientar, reconstruir constantemente, redefinir el horizonte o transformar los modelos.
La evaluación referida a los estados iniciales
Se plantea una situación inicial que dé cuenta del manejo de ciertos saberes, habilidades, actitudes e intereses particulares y fijar reglas de juego en las interacciones, a través de determinada estrategia a manera de diagnóstico del proceso educativo, ya sea con pruebas escritas, cuestionarios, charla informal o mapas de conceptos.
La evaluación referida al sujeto: los procesos individuales
Debe permitir respetar los ritmos particulares, teniendo en cuenta los diferentes momentos por los que atraviesa cada estudiante, puesto que tanto los ritmos de aprendizaje como los intereses son individuales. Los procesos evaluativos requieren responsabilidad y autonomía del estudiante, el docente monitorea y coordina el proceso macro y el estudiante controla y orienta su propio proceso.
Dentro de los procesos individuales están los de comprensión y producción; para ello, los lineamientos curriculares nos presentan unas categorías que le permiten tanto a maestros como estudiantes identificar falencias y fortalezas en dichos procesos; veamos:
Categorías para el análisis de la comprensión lectora.
Nivel A: literal. Las lecturas de primer nivel, o literales, ya sea en el modo de la transcripción o en el modo de la paráfrasis, son instauradas en el marco del “diccionario” o de los significados “estables”, denotativos integrados a las estructuras superficiales de los textos.
Nivel B: inferencia. El lector infiere relaciones y asociaciones entre los significados, que llevan a formas dinámicas del pensamiento como “relaciones de implicación, causación, temporalización, especialización, inclusión, exclusión, agrupación, etc., inherentes a la funcionalidad del pensamiento y constitutivos de todo texto” (MEN, 1998).
Nivel C: crítico-intertextual. La explicación interpretativa se realiza por distintos senderos: va desde la reconstrucción de la macro estructura semántica (coherencia global del texto), pasa por la diferenciación genérico-discursiva (identificación de la superestructura: hay un momento de la lectura en donde todo lector se posiciona críticamente, entendiendo por ello la emisión de juicios respecto a lo leído).
Análisis de textos escritos por estudiantes en contexto de evaluación.
Se debe tener en cuenta un modelo general de rejilla para la evaluación de la producción escrita, desde el plano global, secuencial y local; además, instrumentos de evaluación de los tipos de textos y sus modalidades (informativos, narrativos, argumentativos y explicativos), donde se verifique la representación textual, la superestructura, el punto de vista pragmático, semántico, morfosintáctico y de expresión gráfica. Lo anterior desde la propuesta de una metodología de taller que implica trabajo colectivo de discusión permanente.
INTEGRACIÓN CURRICULAR
Procesos de articulación con otras áreas o proyectos de enseñanza obligatorios
Las unidades didácticas se desarrollan hasta donde sea posible de manera integrada con las demás áreas. Usualmente, estas experiencias didácticas se realizan con la metodología de trabajo cooperativo y en algunos casos, de manera individual. Al finalizar una unidad de aprendizaje, se plantea una situación problemática en relación con una de las áreas o proyectos. Por ejemplo: se analizan problemáticas asociadas con la investigación científica mediadas a través del estándar referido a la ética de la comunicación. Así mismo se analizan casos y campañas sobre la protección del medio ambiente en la institución y el aseo de las aulas. En Tecnología e informática, se da el manejo de criterios de búsqueda y selección de información en bases de datos, el uso de las fuentes de información y citación.
La transversalización con el área de artística se establece mediante un vínculo muy estrecho entre los lenguajes estéticos y sensibles, entre los géneros literarios y movimientos artísticos desde la Antigüedad hasta lo contemporáneo. De igual manera sucede con filosofía, las corrientes filosóficas permiten generar actividades que le faciliten al estudiante relacionar la lógica simbólica, la fenomenología y el existencialismo, en la posición frente a los diferentes discursos de comprensión y/o producción textual. La ética y valores, se integra con el reconocimiento de los actos comunicativos orales y escritos, bien sea a través de discusiones, debates y posiciones evidenciadas en los textos argumentativos desde discursos incluyentes. La educación religiosa posibilita la integración de la condición mitológica en los procesos de comprensión y significación del mundo y de las realidades de los estudiantes.
El dialogo entre las matemáticas y el lenguaje se aborda desde el acercamiento de las estrategias comunicativas como la interpretación y producción de problemas de razonamiento lógico, cercanos a la realidad de los estudiantes. Con las ciencias sociales se establece la articulación de los discursos históricos, geográficos, políticos y económicos con los procesos de comprensión de realidades desde la perspectiva de la diversidad y la interculturalidad a través de los movimientos literarios en las diferentes épocas de la historia nacional e internacional. Por último, la Educación física desde la perspectiva de la comprensión del cuerpo como signo: acciones vinculadas con el reconocimiento de los lenguajes verbales y no verbales que se pueden abordar desde la kinesis y la proxemia, como elementos que aportan significado en la vida social e individual de los estudiantes, en sus procesos de socialización de los conocimientos y de apropiación comunicativa en los espacios que interviene.
La sistematización de las prácticas, lo mismo que los actos evaluativos puntuales, arrojan información que debe ser interpretada desde diferentes niveles. Uno de estos niveles se refiere a los modelos de procesos. Otro de los niveles desde los que se debe interpretar la información arrojada por la sistematización de las prácticas y de los actos evaluativos particulares, se refiere a los estados iniciales.
Referentes bibliográficos
-Ministerio de Educación Nacional. (1998). Lineamientos curriculares Lengua Castellana. Bogotá D.C: Cooperativa Editorial Magisterio.
-Ministerio de Educación Nacional. (2006). Estándares básicos de competencias en Lenguaje. Bogotá D.C: Imprenta Nacional de Colombia.